MaternArte
El arte se nutre de todo lo que nos rodea: desde los grandes acontecimientos hasta los detalles más pequeños. Todo puede transformarse en una expresión artística. Y ahora que celebramos el Día de las Madres, vale la pena hablar del arte que gira en torno a la maternidad, mientras conocemos a distintas artistas y cómo han abordado este tema tan complejo y diverso.
Louise Bourgeois
1911-2010
Empecemos con Louise Bourgeois, nacida en Francia en 1911. Esta artista, ligada tanto al feminismo como al psicoanálisis, exploró las contradicciones de la maternidad a través de su obra. En 1999 presentó la escultura “Maman” (que significa “Mamá” en francés): una araña de 10 metros de alto hecha con bronce, mármol y acero inoxidable.
La pieza representa esa dualidad de la figura materna: protectora, pero también intimidante. Otro de sus trabajos, el dibujo “Fallen Woman” de 1947, refleja los temores físicos y emocionales del embarazo. Con él cuestiona la visión romántica y simplificada del instinto maternal, poniendo sobre la mesa el sufrimiento que a menudo se oculta. Louise falleció en 2010, pero su legado sigue vivo en el arte contemporáneo.
Mary Kelly
1941
Por otro lado está Mary Kelly, artista conceptual estadounidense nacida en 1941, cercana a la segunda ola del feminismo y al movimiento obrero británico.
En su obra “Post-Partum Document” (1973), documentó los primeros años de vida de su hijo usando desde pañales manchados hasta notas del día a día. Con esto, buscó visibilizar el trabajo doméstico que suele pasar desapercibido y se minimiza como si fuera algo fácil. También expresó su crítica hacia cómo se ha convertido la maternidad en un negocio, dejando de lado su valor humano y emocional.
Ana Álvarez-Errecalde
1973
Ana Álvarez-Errecalde, artista visual española nacida en 1973, se ha enfocado en romper tabúes. Su obra más conocida es el autorretrato “Tras el parto” (2005), donde se muestra justo después de dar a luz, con el cordón umbilical aún sin cortar y la sangre visible. Con esta imagen confronta la medicalización del nacimiento, denunciando cómo muchas veces se trata más como una industria que como un momento profundamente humano.
Alice Neel
1900-1983
Alice Neel, pintora estadounidense que vivió de 1900 a 1983, se dedicó principalmente a retratar a madres marginadas, mostrando la maternidad en contextos de pobreza y lucha.
En su cuadro “Margarita y su madre” (1952), retrata a una mujer afrodescendiente amamantando, rompiendo con los estereotipos burgueses de lo que se considera una “madre ideal”.
Marlene Dumas
1953
Marlene Dumas, artista sudafricana nacida en 1953, es conocida por su crítica al colonialismo y al esencialismo de género. Su obra “The First People” (1991) retrata a madres e hijos con tonos pálidos y trazos difusos, transmitiendo una sensación de fragilidad y trauma intergeneracional. A través de esta obra, cuestiona la idea de que la maternidad sea un destino inevitable para las mujeres, sobre todo en sociedades marcadas por la colonización.
Kara Walker
1969
Kara Walker, artista afroamericana nacida en 1969, ha centrado su trabajo en denunciar el racismo y la opresión histórica. Un ejemplo claro es su serie de dibujos Mother and Daughter (2020), creada durante el confinamiento por la pandemia.
En estas piezas, Walker reflexiona sobre la relación madre-hija, el legado intergeneracional y la resiliencia femenina. Aunque su estilo sigue siendo provocador y crítico, estas obras revelan una dimensión más personal, donde la maternidad se presenta como un espacio de cuidado, aprendizaje y también de tensiones. Con ello, Walker demuestra que la maternidad, incluso en medio de la adversidad histórica o personal, es también un terreno de creación y resistencia.
Dorothea Lange
1895-1965
Y cerramos con Dorothea Lange, fotógrafa documental nacida en 1895 y fallecida en 1965. Fue una figura clave durante la Gran Depresión y sus fotografías retrataron el sufrimiento y la resiliencia de la clase trabajadora.
Una de sus imágenes más icónicas es “Madre Migrante” (1936), donde aparece Florence Thompson, una madre luchando por sobrevivir en medio de la pobreza extrema. Esta foto se convirtió en símbolo de la fortaleza de las madres obreras y en una denuncia directa al abandono por parte del Estado.
Mujeres de distintas épocas y rincones del mundo han encontrado en el arte una forma de expresar lo que implica ser madre. Cada una, a su manera, nos recuerda que la maternidad no es sólo cargar a un bebé o darle de comer: es un acto lleno de entrega, valentía y lucha. Y más aún cuando las circunstancias están en contra. Por eso, hoy más que nunca, es importante detenernos a reflexionar sobre el valor de todas las madres: jóvenes, mayores, solteras, casadas, con recursos o sin ellos. Todos venimos de una madre, y en gran parte, somos lo que somos gracias a ella.